martes, 28 de diciembre de 2010

Conversaciones demasiado silenciosas

Se sentaron a tomar colacao una de esas tardes de frío invierno. Querían hablar pero ninguno comenzaba una conversación, se quedaban atónitos mirando el paraje helado desde la ventana mientras a la leche le salía nata. No era tiempo de hablar.
Realmente no querían conversar, simplemente verse, saber que aún existían. No tenían nada nuevo que contarse, ni un chisme que soltar. Pero a ella no le gusta nada que la gente se quede callada:
- Bueno, bonitas navidades, ¿no? - dijo sin saber realmente qué decir.
- Como todas; frío, luces, gente, compras, regalos, noticias buenas, noticias malas...
- ¿Te dieron alguna noticia mala? - se preocupó.
- No - dijo despreocupadamente.
- ¿Te han regalado algo? - se empeñaba en sacar un tema de conversación, el silencio es algo incómodo.
- No - respondió de igual manera.
- ¿Has comprado algo? - exijía ya una respuesta de más de una sílaba.
- No.
Ella le miró extrañada. Comprendió que no era momento de empezar una conversación.
Echó su vaso a un lado, ya frío (la nata le da náuseas). Él removió su colacao y se lo tomó de un trago.
De nuevo se hizo el silencio, cosa que la molestó demasiado.
- Qué sueño - dijo él bostezando.
- Pues vete a dormir - dijo enfurruñada.
- Sí, me voy a la cama - recogió su vaso y lo puso en el fregadero - luego nos vemos.
- Yo... hasta luego - murmuré.

martes, 30 de noviembre de 2010

Abrazos

Abrazos de saludo, abrazos de despedida, abrazos de alegría, de tristeza, de pasión...
Abrazos fuertes, suaves, rígidos, fríos, cálidos y blanditos.
Abrazos largos, abrazos cortos, espontáneos, simultáneos, esperados, deseados, descarados, incómodos, románticos.
Abrazos en la calle, en un bar, en la estación del tren, en la cama...

-Déjame que te abrace... - dijo mientras la rodeaba con sus brazos y el frío se apaciguaba.
-No me gustan los abrazos en la cama - dijo mientras se deshacía de aquel nudo.

Abrazos rotos

lunes, 22 de noviembre de 2010

Olor a almohada

Se recostó sobre su almohada, la abrazó como todas las noches hacía y suspiró dejando reposar sus huesos en el frío colchón. Un agradable aroma se hizo notar en la almohada; estuvo toda la noche recordándolo. Tener tan presente su olor durante toda la noche sólo hacía que le echase más de menos.
Si supiera que había soñado seguro que habría sido con él, y no le molestaba la idea, de hecho ojalá se acordara del sueño...

miércoles, 3 de noviembre de 2010

Aproximaciones

Iba andando a su lado. A veces se rozaban sus manos y ella pensaba:
- ¿Lo estará haciendo queriendo o es la simple inercia del movimiento? - pensaba mientras una y otra vez se encontraban sus dedos - ¿Estará pensando él en lo mismo que yo?
Ella lo suponía. Eso no parecía simple ley física.
Cada vez que se tocaban ella se sorprendía, estaba tan concentrada en ello que no podía seguir el hilo de la conversación.
- ¿Me entiendes? - le preguntaba.
- Ah, perdona. Es que estoy algo despistada - decía entre risas.
No pudo contener su euforia y le dió un apretón en la mano. Se le quedó el brazo de piedra y una ola de escalofrío le erizó los vellos del cuerpo.
La brisa levantó su falda y le lleno el pelo de cachitos de hojas, entre tosidos él se acercó y la tomó del brazo. Con los ojos resplandecientes ella le miró fijamente.
- Vamos que perdemos el autobús - dijo mientras le dedicaba una sonrisa.
- Claro - dijo ella sacudiendose la falda.

sábado, 2 de octubre de 2010

Calles de invierno



No quería seguir encerrada en su casa, esto sólo le hacía pensar más en él.
Cogió las llaves y se dispuso a salir por la puerta, no sin antes pararse a ponerse su chaqueta y un buen gorro de lana que le mantuviera la cabeza caliente.
Al abrir la puerta, el frío se metió entre sus ropas y heló su faz dándole aspecto de marfil.
Frotó sus manos con ademán de sentirse cálida durante un instante; fracasando en el intento se enrrolló una bufanza verde en el cuello tapando también nariz y boca para que el frío no pudiera calarla.
Resbaladizas y blancas calles se extendían sin visión alguna del horizonte, su mirada sólo podía posarse en sus pies. Pobre del que andara despistado por estas calles, más de uno llegaría a su casa con un buen moratón en el culo. Pero ella es precavida y cuidadosa, no se dejaría vencer por un asfalto helado.
La bruma descendió, y la niebla no dejaba ver más allá de un brazo estirado. De la nada apareció un nevado banco; lo sacudió y se acurrucó sobre aquel congelado mármol.
De su bolso sacó un cigarrillo y un mechero; si quiera el humo del tabaco era perceptible para su visión.
Algo la rozó. Parecía ser que alguien había tenido la misma idea que ella, dos solitarias personas que andan por la calle y piensan en hacer lo mismo.
Él también sacó un cigarro de su bolsillo trasero y amablemente le pidió fuego.
- Perdone, ¿tiene fuego? - dijo mientras se descolocaba la bufanda para dejar a la luz su boca, y con ella, su rostro.
De entre la bruma, dos cachitos de cielo brillaron; sus ojos azules calaron en lo más hondo de aquellos ojitos color miel.
- Claro, tome - dijo mostrándole el mechero. Pero el mechero no se percibía entre tanta niebla y tanta bruma.
Él le agarró las manos. Ella depositó su mechero.
La calidez de sus manos la dejó perpleja.
- No puede ser más que él - pensó.
Él pareció percatarse de lo que pensaba en aquel instante. Tomandola por las mejillas, cálido contacto sobre una helada piel, con sus ojos y bocas a menos de 20 centímetros de distancia, la besó como se besan aquellas parejas que se despiden en el aeropuerto o en el andén.
El fuero ardor los recorrió, llevándose con él el frío y ese sentimiento de soledad.
Ella no pudo evitar llorar. Apretando sus parpados, dos gotitas de cristal se deslizaron.
Él la abrazó, la hundió en su pecho.
Ella le agarró con fuerza y no lo soltó.
Nunca.

domingo, 12 de septiembre de 2010

Caladas de madrugada

Yann Tiersen - Sur le fil


Dejó de mirar tras la húmeda ventana y se dispuso a abrirla.

Entre sus dedos se consumía placebo barato que hacía unos minutos había comprado. El humo se mezclaba con el aire, casi invisible solo para los despistados. Describían ondas, espirales, círculos...
Retorciendo su pelo con los dedos, ella le daba profundas caladas, buscando encontrar algo que le guste del tabaco que le hiciera realmente fumar.
El frío calaba sus huesos, pero no le importaba. No se levantaría para ponerse alguna prenda más, bastaba con su chaqueta y su ropa interior.
Dejaba colgar sus piernas al vácio, a unas 5 plantas del asfalto. Las escaleras de emergencias estaban congeladas pero a ella le gustaba notarlas bajo sus manos y el marco de la ventana bajo sus pantorrillas. Encojía y apretaba los dedos de sus pies, haciendo crujírlos Odiaba ese sonido pero en aquel momento le reconfortaba, le hacía sentir menos sola.
Los pensamientos iban y venían, pululaban en el aire, como las amargas caladas de muerte que se camuflaban bajo humo, ondeante humo que describe formas tan bonitas. Sólo las personas solitarias pueden pensar que el humo del tabaco describe formas bellas, despreocupadas y moldeables, que déjan llevarse por la corriente sin voz ni voto.

El móvil no dejaba de vibrar sobre las sábanas de su cama, iluminába toda la habitación de luces apagadas, parpadeantemente y alertando. Pero ella no quería ni mirar quién podría llamarla un lunes a las 3 de la madrugada.
Aquella persona del otro lado del teléfono tendría que esperar.

lunes, 14 de junio de 2010

Une danse de feu

*Canción "La Valse D'Amélie - Yann Tiersen"*
Y se miraban fijamente, a la luz de unas velas. Sus ojos brillaban, ardían de pasión, sus corazones se aceleraban cada vez que se encontraban sus manos...
Él la invitó a bailar. Todo daba vueltas, el fonde se fundía, sólo estaban ella y él, por fín unidos. Su fragancia le excitaba, él solo quería bailar más rápido, más pegados. La cera de las velas inundaban la mesa donde se sentaron a comer, los platos, aún sin haber sido degustados, yacían fríos, deseosos de que alguien los probara. Pero ellos seguían bailando; las llamas de las velas tocaron mantel, la tela prendía y danzaba al son de la música. Todos y todas las cosas envidiaban a aquella pareja. Él y ella, ella y él, ellos y sólo ellos. El humo que desprendía el mantel cada vez era más oscuro, más denso. No había quién los parase. La habitación comenzó a arder en llamas, llamaradas, y en el centro, ella y él, mirándose fijamente.
- Qué más importa si ya estoy contigo - dijo ella.
- Hoy te quiero más que nunca - le susurró él al oído.
Ella se revolvió. Se abrazaron tan fuertemente... no se querían separar. Iban perdiendo la noción del tiempo y sus manos aún se ataban fuertemente unas a las otras.
El dulce sonido del fuego y la música se vieron interrumpidos por el crujido de una puerta rompiendose. Los bomberos entraron a toda prisa.
- ¡No! - gritó ella mientras se la llevaban hacia afuera, a salvo de las llamaradas.
- Tranquila, nunca nos separarán - gritó él, arrodillado en el suelo con las manos extendidas, esperando a que llegara otra bombero a por él.
La música llegaba a su fin, la escena dejaría de representarse en escasos segundos.
Tumbado en el suelo, retorcido y tosiendo, él aún esperaba la llegada de otro cualquier bombero.

jueves, 10 de junio de 2010

Huesos

*Melodía Extremoduro - Salir, beber*
- Parece que he tirado mi vida por la borda - pensaba mientras me encendía un cigarro y veía correr a un niño delante mía - pero sé que no lo he hecho - doy una calada.
- He vivido lo que ese niño está viviendo, y ahora estoy aquí... me gusta en lo que me he convertido - me decía amí misma mientras no dejaba de mirar al niño.
El niño parecía intimidado, seguro que mi mirada taladraba su espalda. El chico no paraba de darse la vuelta y de correr al mismo tiempo.
- Ojalá se caiga - pensé.
En el mismo momento en el que le dí una calada al cigarro la canción hizo lo mismo (no sé si habreis escuchado esta canción, aunque sé que algunos sí que lo han hecho). Me sentí parte de ella en ese momento. Después de expulsar el humo repetí lo que decía la letra de la canción: "Para algunos, la vida es galopar
un camino empedrado de horas, minutos y segundos. Yo, más humilde soy, y solo quiero que la ola que surge del último suspiro de un segundo me transporte mecido hasta el siguiente."

Tiene sentido, ¿verdad? Pues yo pienso lo mismo de la vida. Me dejare llevar por aquella ola...
Cuando quería darme cuenta el chico ya me había dado esquinazo, y el cigarrillo me quemaba los dedos. Se estaba consumiendo el filtro.
La canción se cambió; ahora escuchaba The Red Hot Chili Peppers - Snow (Hey oh). Agarré con fuerza el cuaderno que llevaba en la mano izquierda mientras fumaba y lo aplasté contra mi pecho. Una sonrisa se me dibujó en la cara. Saqué un caramelo de manzana (mis preferidos) de la mochila, lo abrí y me lo tomé.
Abrí la puerta de la academia.
*Música* Heeey oooh... *Pausa*
- Hola Mati - le saludé - ¡Hola mortadelo! - le acaricié mientras este ronroneaba.
- Buenas.

lunes, 7 de junio de 2010

Perfume embriagador

No sé si ella era consciente de todo el tiempo que él la había estado esperando. Quizás no sea esa espera romántica en la cual lo das todo por la otra persona y quizás, tampoco sería tanto tiempo pero, al fin y al cabo, la esperó. La situación fue muy extraña: él no sabía si era lo correcto actuar ya que no sabía que pensaba ella sobre eso, ella... supongo que no puedo explicarlo porque no sé qué sentía.
Por la mañana, él estaba preocupado: ¿Fue un error?, ¿Se acordará?, ¿Se arrepentirá?
Pero bueno, ya había ocurrido, por eso él le quito importancia.
A la tarde sus miradas se volvieron a encontrar y sus sentidos ya estaban lo suficientemente cuerdos como para saber qué hacían. Fue muy bonito, y él deseó con todas sus fuerzas que siempre fuera así, que sus sentimientos hacia ella no cambiaran. Hombre, como todas las cosas, debían de evolucionar pero que en el fondo... siempre quedara aquello.
Había arriesgado, y él creía que había ganado pero, ¿será así? La cosa todavía estaba por averiguar.
Y se averiguará... Si ha de cambiar algo, la cambiará ella. Él espera no cambiar nada, solo no equivocarse. Por suerte, estaba seguro de que había apostado a un buen número (¡pero él nunca lo consideró una quiniela!), solo qué, en este aspecto, él siempre había sido una persona insegura.

Disfruta la caida porque todo tiene un final, y el final siempre es un duro y frío pavimento en el que descubres si estuvistes solo siempre o si en tu caida te acompañó más de una persona.
Él solo espera que el final no esté cerca.

miércoles, 31 de marzo de 2010

Everybody live in Neverland

¡Que bonitas son las sonrisas!
De verdad que me he dado cuenta que tendemos a poner todo lo depresivo en los blogs... ¿por qué la inspiración es tan masoca? Pero es que es verdad que cuando te pones a escribir no te sale nada alegre, cuando nos ponemos a escribir sacamos lo malo de nuestro corazón, intentando llegar a una respuesta... ¿inexistente?
Bueno, pensemos en positivo. No sé, yo que soy tan alegre y las masocadas que escribo aquí son enormes! Pero es verdad que desde hace ya unos meses voy dando tumbos, hacia arriba y hacia abajo. Antes tenía un único camino pero conforme va pasando el tiempo más se complican las cosas... Tiene que ser horrible ser adulto pero más nosotros que somos niños jugando a serlos. No sabemos el significado de adulto ni lo que conlleva. Tan solo somos simples criajos que creemos saber más que nadie, con esta mentalidad no llegaremos a saber. ¿Pero quién es más listo que quién? y ahora no me refiero a 'listo' como al que lee más libros o sabe más de mates que no sé quién. Cada uno le aporta algo a este mundo para las futúras generaciones... No nos creamos menos por ser quiénes somos, exijámonos pero siempre por nuestro bien y por el de las futuras generaciones...
¡Qué ignorantes llegamos a ser...!

lunes, 29 de marzo de 2010

Real morning

Estoy aquí sin motivo aparente, escuchando música y viendo las horas pasar en el reloj. Simples números que van rotando... y lo noto. El día va cambiando, la vida también. Hoy no me sale nada específico, no sé cómo me siento. Quizás sea frustración, no sé...
El poder que tiene la música en los sentimientos es inmensa, puedes estar tan feliz que pones una canción triste y te desanimas. ¿Qué frágiles somos, no? Como gotitas de cristal al borde de las pestañas tendiendo a precipitarse. ¿Cuántas veces nos hemos roto y nos hemos vuelto a componer? y seguimos ahí, pendiendo de las puntas de las pestañas humedecidas y resbaladizas rezando porque el viento no agite nuestro ser, no volvamos a caer...
Hoy estaba feliz, en mi sueño. ¡Que mal te sientes cuando te levantan de un sueño profundo para hacer tareas!
Quizás nos veamos más, quizás no... depende de cuanto dure mi castigo.

sábado, 6 de marzo de 2010

Realidad


Volad pajarillos. Fueron liberados de sus cadenas, salid de esta oscura jaula que nada os deja ver, mirad más allá de estos 4 barrotes que disimulan la realidad en su totalidad.
- ¿Qué realidad en su totalidad? - preguntó el pajarillo "Z"
- La verdad de todas las cosas - dijo "X".
- Ésta es mi realidad. 4 barrotes, un comedero y un bebedero. ¿Qué más he de saber?
- La realidad, no tú realidad.
- Si me sacáis desencuadrareis la forma en la que veo las cosas, la vida que llevé no tendrá sentido, transtornareis mi mente... eso debe ser un gran shock.
- Descubre la verdad, tu puerta ha sido abierta.
- ¿Acaso he de querer conocer la verdad? A lo mejor solo quiero quedarme con mi verdad de ello, porque para mi estar en mi jaula es la realidad... ¿qué me pasará si salgo al exterior?
- Conoceras lo bueno y lo malo de las cosas. Lo malo de quedarse en la jaula, lo bueno de seguir en ella.
- ¿Y para qué quiero saberlo? ¿Qué es bueno y qué es malo? Prefiero mi autenticidad de las cosas, prefiero ser ignorante y feliz a saberlo todo y correr el riesgo de estar triste...
- ¿De verdad no quieres comprenderlo?
- No, prefiero mi estabilidad.
- Pues yo quiero salir, conocer todas las posibilidades. Reir, llorar, gritar, saber, ver... Que me digan la verdad, sin rodeos, sea buena o mala. No pienso quedarme aquí parado. Algunas cosas me chocaran más que otras, me dolerán, me alegrarán. Si me caigo me levantaré, si he de volverme a caer lo haré y volveré a levantarme pero yo... Yo quiero vivir.
- Yo también vivo, vivo mi mundo y mi realidad, mis creencias.
- Pues rectifico, quiero vivir la vida, la realidad. Toda ella, sin excepciones. Sin mascaras, con y sin ataduras.
- Corre pajarillo, las puertas de la jaula pronto se cerrarán. La mente nunca permanece abierta.
- Quiero que me seas honesto... ¿cómo sabías que saldría de aquí?
- Soy tu mejor amigo, no te escondo nada.

domingo, 28 de febrero de 2010

Un día


Miro por la ventana, el sol baña mi piel. Ayer perdí el bus, llegué empapada a casa, las llaves se me rompieron al hacer demasiada fuerza para abrir el pestillo de la puerta, siempre está muy duro. Pero ese día no podía pasar, me quedé mirando como las gotitas me mojaban... ¿podían hacerlo más de lo que ya lo estaba? Desde el jardín escuchaba como sonaba el teléfono, esa llamada tan importante que debía de contestar, no paraba de sonar. Saqué mi móvil: 615... Batería baja.
- ¿Es que algo peor puede ocurrir?
Por qué siempre hacemos estas preguntas, si solo sirven para hacernos tragar nuestras palabras.
Las luces de la calle se apagaron, el teléfono dejó de sonar.
Intenté saltar la cancela de mi casa, me resbalaba una y otra vez. Pude poner un pie en un huequito, pero el huequecito se derrumbó y con él yo también, caí al suelo. Sonaron derrapar unas llaves, no me acordaba de que la llave que se había roto era la de la puerta de mi casa, no la de la cancela. Tenía que levantarme, me dolía la cabeza, mi bolso se empapaba, era demasiado tarde... pero no quería hacerlo, me dediqué a contemplar las pocas estrellas que desde mi jardín se veían.
- Maldita polución.
1, 2, 3, 4... ¿4 estrellas? Tan sólo 4 estrellas que inundaron mi pensamiento durante toda la noche.
1, 2, 3, 4. 1, 2, 3, 4. 1, 2, 3, 4... de cuatro en cuatro, como las gotitas que me empañaban la cara, un continuo goteo sobre una superficia mojada que al ir llegando a sus labios se iba haciendo salado.
- Menos mal que soy afortunada. La vida no me puede ir mejor - sonreía.
- Llora - dijo alguien - llora porque hoy puede haber sido el peor día de tu vida, pero sonríe, porque mañana será un feliz día, como el resto de 364 días...

Y al abrir los ojos, un arcoíris despampanante se reflejaba en la apagada pantalla de su móvil...

domingo, 7 de febrero de 2010

Pasotismo



Decidme, sinceramente: ¿Creeis que soy tan pasota?

Perdonadme por mi pasotismo natural, es irremediable... Pero aunque no lo creais, las cosas las siento como las sentís ustedes. El ser pasota es mi escudo, no lo sé utilizar bien.

viernes, 5 de febrero de 2010

Matrix


No va a haber rendición porque no comencé nada. Me pintaron miles de maravillas de las cuales solo me quedé con las amargas noches de espera, incertidumbre... Yo tan solo anhelaba que de tu boca saliera algo, de hecho lo sigo haciendo. Seré tonta, siempre creyendome lo que dicen. Deformaron mi realidad y me hicieron ver las cosas de diferente manera, mis ojos llegaron a ver las mentiras que me dibujaban, inconscientes, transformandolo todo a su paso tan solo para no hacerme daño, para no dejar que me choque con el mundo.

Y me dejaron sumida en matrix...

sábado, 30 de enero de 2010

Hoy


Y otra vez caigo, en esta red de marañas tejida por más de mil arañas... no me desenredo, los filamentos me traspasan y parezco no darme cuenta, hasta que me veo agujereada. Pensar que mañana pueda ser peor no ayuda, quizás aparezca envuelta entre tanta telaraña.

Yo ya estoy por abandonar...

viernes, 22 de enero de 2010

Estoy feliz


Lo sabía, sabía que podía confiar en ti. De verdad, te admiro, no he conocido a nadie como tú...


Te quiero hermanita, y dentro de poco nos vemos.

miércoles, 20 de enero de 2010

Ahora más que nunca


¡Sé que eres fuerte! No me dejes por tonta. Desde aquí tienes todo mi apollo, toda mi fuerza, todo lo que necesites y lo sabes... También sé que dentro de nada nos volveremos a ver y me harás la hermana más feliz del mundo.
Te quiero demasiado como para dejarte ir, me quieres demasiado como para dejarme aquí.
Hoy como tantos días mis plegarias van por ti pero esta vez tendrán más fuerza y podrán traspasar las barreras de lo real y lo irreal, lo racional y lo irracional... del tiempo y la distancia.
Te quiero, y de aquí a poco podré decirtelo al oído...

lunes, 18 de enero de 2010

Love


Explota en mi corazón haciendo que sueñe con él cuando duermo y que piense en él cuando despierto.
No puedo hablar de amor porque no lo he vivido pero, perhaps...

martes, 12 de enero de 2010

Siento, luego existo


A veces necesitamos sentir el frío hervor que nos producen las gotitas de la lluvia al acariciarnos la cara para saber que existimos. El paragüas simula una barrera que no nos deja ver la felicidad y que en otros casos nos protege de peligros, éste no nos deja ver que el día no está tan oscuro como creíamos o tambien hace que no veamos que el día parezca tan infínito y homogéneo, de estos que parece que se te van a caer encima.
El sentir me dice que estoy viva; ahora mismo se han ido todos mis miedos y creo que no volverán... al menos durante un tiempo (o eso espero). Los miedos me hacen ser cada día más fuerte porque cada día se me suma uno más al montón, a algunos ya soy inmune, otros me atormentaban y me atormentarán. Sé que ahora estoy siendo fuerte y me hace sentir más fuerte el saber que mañana lo seré más aún.

Te quiero hermanita, y te lo dedico, porque más fuerte que tú no hay nadie.
Una amiga me premió con algo:
Premio Espada.
1. Debes agradecérselo al blog que te lo otorgó: Muchas gracias Enferma! Me encanta leer lo que escribes y cuando veo que has actualizado siempre me entra la inspiración. Quieras que no con esto del blog sabemos más una de la otra y de alguna forma nos hemos ayudado, nos estamos ayudando y nos ayudaremos. Espero que esto no se quede en unas simples confesiones a media noche en el blog ^^. En definitiva; adoro las fotos que haces y cómo escribes, cómo piensas también (aunque en algunas cosas no coincidamos, eso es lo que lo hace especial) porque tus pensamientos enfermizos concuerdan muchas veces con los míos, aunque seamos diferentes al fín y al cabo somos personas con los mismos pilares. Gracias de nuevo! Y pasense por su blog
Puerta al sótano lo recomiendo de veras.
2. Debes mencionar a tu heroína preferida: Heroína... Supongo que catwoman, pero nada más porque adoro los gatos y no queda muy lejos de mi pensamiento el sueño ese de ser una neko girl. Ella lo ha conseguido y encima combate contra lo que se interpone ante sus principios.
3. Otórgaselo a tus blogs preferidos:
Como ya antes se lo han otorgado a otros blogs que me gustan se lo otorgaré a
- Suzu, mi primita Darkness of the night
- Claudia, que escribe de maravilla Última parada

domingo, 10 de enero de 2010

Cachito a cachito, trocitos de mi mundo van cayendo al vacío y tan solo escuchó el impacto de ellos con el suelo, haciendose trocitos aún más pequeñitos... no sabía que el vacío tuviese final. Podría lanzarme y descubrirlo, chocar con mi realidad o flotar en la fantasía, fabulosa fantasía.
Me gustaría poder deshacerme a mi antojo, liarme y desliarme como una bolita de lana, lanzarme y estrellarme, caer lentamente como hoja de otoño cae al suelo dejando que los remolinos de viento jueguen conmigo a su antojo...

Me he dado cuenta de que aquí solo escribo lo malo de mi día a día menos mal que esto que escribo tan sólo es el 2% de mi vida diaria, aunque a veces me sobre pasa... muy pocas veces.

miércoles, 6 de enero de 2010

Corazón de reloj


Primero, no toques las agujas de tu corazón. Segundo, domina tu cólera. Tercero y más importante, no te enamores jamás de los jamases. Si no cumples estas normas, la gran aguja del reloj de tu corazón traspasará tu piel, tus huesos se fracturarán y la mecánica del corazón se estropeará de nuevo.

lunes, 4 de enero de 2010

Año nuevo


Tan sólo días nos separan del año pasado...
Mi cumple años llegó a su fín con el comienzo del nuevo año. Soy un año mayor, aunque no lo noto.
Me seguirán pasando las mismas cosas, cometeré los mismos errores, me gustarán las mismas cosas... Cada vez uno va cambiando menos. Cada año que pasa te va asentando tus ideales, la forma de pensar... Me alegra porque llegará el día en que no pueda cometer el mismo error porque ya sepa la respuesta pero aun así también llegará el día en el que me enfrente a un nuevo error.

Feliz año nuevo, hoy solo me duele la cabeza.