domingo, 22 de julio de 2012

A fregar

Es como un vaivén, parece que quiero dejarme por tonta. Mis sentimientos, mis pensamientos, cambian constantemente, aleatorios, no me dejan ver con claridad.
Estoy desesperada. No sé qué hacer, no sé qué quiero hacer.

Joder, duele. Esta mierda duele demasiado, me siento desgarrada. Tengo ganas de romperlo todo, de no tener nada.
Tengo serias ganas de clavarme un puñal en el pecho. No para sentir dolor, joder, ¡no quiero sentir más dolor! Pero si tengo ganas de hacerme daño, tanto, que lo demás me parezca un simple corte con una hoja.
Tengo ganas de joderme, de volverme loca -si es que aún no lo estoy- de patearlo todo, que todos me odien.

Llevo rabia, mucha rabia dentro. Tengo impotencia, locura, vicio. Me voy a tirar por un puto precipicio.

Cosas de por la mañana

Tengo el corazón encogido. Está apretado, aplastado, en un rincón, escondido en mi pecho. Le da miedo volver a salir. Le duele todo, está sensible, es frágil.

Es fácil, sonreír y hacer como que no pasa nada. Pero siempre está pasando, se repite en mi cabeza, y no se va, y ahí está, como una brecha en el tiempo, que dicen que algún día se cerrará, pero que ahora quema, arde y quiere salir. Sin darme cuenta, a veces, se refleja en mis ojos.

Intento estar bien, lo prometo; ser positiva, ¡todo tiene algo bueno! pero no lo encuentro, no lo veo, en este camino oscuro, ya se derritió toda la cera, quemándome, me quedé sin vela.

No sé qué hacer, de verdad, no lo sé. Sólo sé que me siento más sola que nunca.

miércoles, 18 de julio de 2012

YingYang

Me siento bien, extrañamente bien, es como una mezcla, el ying y el yang. Siento como si dolor y felicidad se mezclaran en perfecta armonía. Te quiero, pero me duele. Lejos o cerca, parece que el dolor no cesará. Dicen que es el tiempo, aunque no me gusta tener que esperar al tiempo para que cuando quiera haga lo que tenga que hacer. Quiero ser capaz de mirarte y pensar en lo bueno, en lo que fuimos, pero no desear volver a estar contigo. Quiero, quiero estar contigo, pero es imposible. Somos cómo dos polos que se repelen. Y te busco, y haces como que me buscar, y la fuerza nos vuelve a separar. Pero no sé si esto está bien, por eso no sé qué hacer. ¿Y si el tiempo me dice que me equivoqué, que eres lo que más quiero, he querido y querré en mi vida? ¿Y si ya es demasiado tarde? No quiero más riesgos, no quiero tomar más decisiones.
Pero la vida va de eso, de decisiones, de meter la pata o de salir airoso.

La duda, es algo que siempre me ha acompañado. Lo dudo todo, lo cuestiono todo, lo devoro todo.

Ojalá de esta salgamos airosos.

martes, 17 de julio de 2012

Quisiera decirlo

Ojalá pudiera pero es que no me sale. Claro, cómo poder decirlo en realidad puedo, no soy gilipollas. El caso es que ¿para qué? Si no es verdad. Es mentira, y si a la única que tengo que engañar es a mi, lo llevo claro. No puedo, quiero hacerlo, pero no puedo. ¿Por qué es tan difícil? A los demás parece que les funciona. Son tantas cosas las que tengo que aprender... ¡Son mecanismos de autodefensa! ¿Por qué yo no los tengo? ¿Por qué no los desarrollo? Si estoy hasta el culo de sufrir, por qué no puedo parar de hacer las cosas igual. ¿Nada me hará cambiar? ¿Tendré que seguir escondiéndome detrás de esta sonrisa congelada? ¿Seguir sintiendo cuchillazos en el corazón?
No quiero.

Quiero que no me importes, que me des igual, tú y todos. Quiero sentirme más orgullosa de lo que hago que de lo que hacen, quiero sentirme dueña de mi vida y que no se rija por la de los demás. Quiero no esperar nada de nadie, esperar duele. Es algo que siempre hago, esperar. Da igual cuanto tiempo, seguiré esperando, y cada día que pase pesará aún más.

Y estoy escribiendo esto, y la sonrisa no se va, es como una maldición.